Calificación: 4/5
Por: Atilio Flores
Dentro de la línea argumental de los superhéroes, destacar a la Wonder Woman, es resaltar el valor femenino en un mundo donde los héroes son sólo hombres. La mitología griega, en sí, resalta muy bien este elemento con la presencia de las guerreras amazonas y otras figuras donde no las coloca como las damiselas en peligro, sino más bien como las heroínas que rescatan y salvan los valores del hombre.
DC Comics, retoma esta aventurera de forma muy acertada, luego de tres películas que parecían hundirse poco a poco dentro de su universo extendido; tras el fracaso de Batman vs. Superman y Escuadrón Suicida, surge la Mujer Maravilla, aunque no con un trabajado arco argumental, pero si, simbólico en esencia.
Gal Gadot llega a conquistar la pantalla con cada toma y escena dentro del filme, impregnando un carisma que permite identificar en los cinéfilos la sensación de comprensión y sensibilidad de la humanidad que se va perdiendo en la oscuridad de la guerra y el mundo moderno. Su interpretación permite fácilmente conectar con lo mítico del personaje, no sólo por su belleza, sino por la calidez humana que refleja a lo largo de la cinta.
Del mismo modo, la elección del cast es bastante certera, tanto por parte de Chris Pine, como por Saïd Taghmaoui, Ewen Bremmer y Eugene Brave Rock, al funcionar casi a la perfección la comanchería y los momentos de humor, los cuales son bien utilizados en los momentos propicios sin caer en el abuso.
No obstante, la historia dentro de su armonía se vuelve tediosa por momentos, haciendo la trama lenta al nunca llegar a los momentos de acción que esperamos ver propiamente de la heroína, los cuales al llegar son exagerados en slow motion, pero no por eso dejan de ser un espectáculo visual impresionante aunado a la coloración que representa a una Inglaterra de los años 20's.
Otro punto que es de reconocer dentro de la edición del filme, es la supresión del sonido icónico que trataron de establecer desde su primera aparición en Dawn The Justice, el cual volvía bastante estresante la aparición de su personaje en cada toma o escena.
Por otra parte, el manejo de sus villanos no es el más espléndido, sin embargo, conservar la figura de Ares como el principal enemigo de forma enigmática hasta el final, logra darle un factor sherlockiano muy bueno que lamentable no supieron explotar a plenitud con un desenlace poco convincente. Detalle que no construye consistentemente al personaje interpretado por David Thewlis, por lo que sus aspiraciones no superan al típico villano desperdiciado junto a la Dra. Veneno.
Similarmente, el final de dicho filme, a pesar de darnos un memorable descenlace con la muerte de Steve Trevor, la lucha de Wonder Woman con su medio hermano Ares no culmina con un ímpetu vigoroso propio del dios de la guerra.
Además resulta poco creíble vender la idea que la princesa amazona se conserve sin ningún rasguño y mantenga su pulcritud en todo momento tras mantener extenuantes batallas, hecho que se visualizó desde su primera aparición con su cameo en Batman vs. Superman y su pelea contra Doomsday.
Sin lugar a dudas, este filme debió de ser la segunda partida del DCEU y no la cuarta; le hubiese dado más conectividad a los hechos de Batman vs. Superman, y sobre todo, el descubrir de la fórmula secreta: no abandonar el camino humano que caracteriza a los héroes, no por el hecho de que lo sean o no, sino que nos identifiquen con sus acciones y temores para devolvernos la esperanza justiciera que falta en nuestras sociedades. ¿Coméntame que te pareció? Déjame tu opinión.
